La Consejería de Sanidad lleva más de diez años ofreciendo peores condiciones, a pesar de ser los profesionales que solucionan gran parte de los problemas de atención primaria.

AMEACYL, 9 de Julio de 2018


            Las condiciones laborales de los profesionales de área de Atención Primaria de Castilla y León, que incluyen a médicos y enfermeros cuya jornada se realiza fundamentalmente en las urgencias de los centros de salud, siguen siendo controvertidas. Una vez han sido cubiertas las plazas de enfermeros de área por personal fijo tras la última oposición, la propia administración se ha visto obligada a modificar sus intenciones con los médicos de área, a los que ha concedido permisos para ocupar otra plaza distinta de las que la Consejería les había ofertado, con el fin de evitar su escapada en una búsqueda desesperada de condiciones laborales dignas, y a las que a pesar de su esfuerzo han renunciado más de 30 opositores, lo que es contradictorio ya que para cualquier otro opositor rechazar una plaza sería algo impensable.

            Las distintas plataformas por la defensa de la sanidad pública de nuestra comunidad han remarcado la necesidad de un cambio en la política de contratación en sanidad, sobre la que es necesaria un cambio de modelo organizativo que garantice la continuidad y la calidad asistencial. El afrontamiento de la situación actual exige un compromiso de los profesionales y de los gerentes, con el fin de asegurar la calidad de la atención y el seguimiento asistencial de los usuarios del sistema de salud, y que permitiría ofrecer contratos más largos, estables, y en mejores condiciones a los profesionales que abandonan nuestra comunidad ante las inaceptables condiciones laborales que imponen las distintas gerencias de salud, además de promover mejoras en la conciliación familiar, social y laboral, al igual que mayor reconocimiento profesional y retributivo.

            Una vez finalizada la incorporación de los últimos enfermeros y médicos de área a sus plazas, la Agrupación de Profesionales de Área de Castilla y León (AMEACyL) ha solicitado ser recibida por el Consejero de Sanidad, con el objetivo de plantear la problemática del colectivo e informar de la necesidad de cambios. Para ello, AMEACyL ha realizado una encuesta que evidencia los puntos que generan mayor decepción entre el personal de área y que supone la dificultad de su cobertura, puntos que se consideran prioritarios para conseguir la dignidad de estos puestos de los que la administración pública realiza un claro abuso, convirtiéndolas en destinos que muy pocos están dispuestos a aceptar.

            El personal de Área identifica entre sus principales problemas la grave discriminación con respecto a profesionales de su misma categoría de Sacyl en materia del reparto de guardias y descansos, la falta de reconocimiento a su trabajo en jornada nocturna y festivos, la falta de garantía de su jornada mínima legal, el incumplimiento de la normativa de vacaciones y permisos, o la alteración arbitraria y unilateral por parte de Sacyl de sus tiempos de trabajo y descanso. Este personal es utilizado por la administración como "chicos/as para todo", para cubrir lo que sea necesario, y debe estar siempre disponible, aún sin ser convenientemente retribuido.

            El enfrentamiento en estas circunstancias está asegurado, creando mal ambiente de trabajo entre los profesionales, y generando una situación que había sido prevista desde hace años, pero que la propia administración mantiene con criterios muy ventajosos para la misma, no solo por el ahorro que supone a nivel económico sacrificando la calidad asistencial, sino también para las distintas gerencias, debido a la facilidad de gestión de un personal que acostumbra a manejar según le conviene sin respetar la normativa, y que mantiene a más de mil profesionales en clara desventaja y dependencia en relación con el resto, aun realizando los mismas actividades y asumiendo la misma responsabilidad.